Fotos: cortesía Morena
El partido Morena tocó este domingo los primeros tambores de guerra rumbo al 2023 en Toluca.
Encabezados por su dirigente nacional Mario Delgado, por aspirantes a la candidatura presidencial y a la candidatura mexiquense, la militancia morenista se declaró lista para arrebatar al PRI el gobierno del Estado de México, y de paso, también el de Coahuila.
Fue un evento multidinario a donde asistieron gobernadoras y gobernadores, senadores, diputadas y diputados locales y federales, así como ediles.
Las y los morenistas se concentraron en la explanada del teatro Morelos, una plaza que tradicionalmente no es utilizada para mítines políticos.
Ahí, los principales liderazgos de ese partido anunciaron que buscarán el triunfo el siguiente año, pero exigieron unidad a sus militantes.
En el evento de este domingo, donde todos los oradores fueron actores políticos nacionales, el líder Mario Delgado llamó a un pacto de unidad, advirtió que la o el candidato tanto estatal, como nacional derivará de una encuesta, estableció plazos y propuso la renovación de sus órganos internos.
Anunció que en 10 días lanzarán la convocatoria para seleccionar a la o el responsable de la organización de los Comités de la Defensa de la Cuarta Transformación en el Estado de México y en Coahuila. Estarán listos el 20 de julio, aunque, de acuerdo con integrantes de ese partido, ser elegidos no garantizará que posteriormente sean las o los candidatos a la gubernatura.
Para el ámbito nacional Mario Delgado anunció que habrá dos encuestas para elegir a su abanderada o abanderado: la primera será el siguiente año y a partir de ahí vendrá una segunda con los nombres finalistas, de donde saldrá su candidata o candidato presidencial.
Morena permitió el lucimiento de sus tres principales aspirantes a la candidatura presidencial: la jefa de gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum, el canciller Marcelo Ebrard y el secretario de Gobernación Adán Augusto López. Los tres resaltaron la figura del presidente Andrés Manuel López Obrador y llamaron a la unidad.
El titular de Gobernación fue más allá y advirtió que los tiempos actuales son de unidad y del presidente. Exigió no regatear apoyo al mandatario nacional.
El presidente, sin estar presente, fue el nombre más mencionado y señalado como el principal factor de unidad y de triunfo de Morena.
Durante el evento hubo lonas, cartulinas y fotografías de apoyo tanto a aspirantes nacionales, como estatales, y la más aplaudida del evento fue la jefa de gobierno capitalina; mientras entre los mexiquenses hubo más apoyos para Delfina Gómez e Higinio Martínez.
Sin embargo a las figuras del Estado de México las mantuvieron en segundo plano con un papel discreto y solo fueron mencionadas en la presentación, aunque por todos lados había publicidad a favor de Gómez, Martínez y el titular de Aduanas, Horacio Duarte.
El partido Morena arribó con la confianza de haber ganado en los primeros días de este mes cuatro de seis gubernaturas; de hecho lo presumió en varias ocasiones, así como que ya gobierna 22 de los 32 estados del país; sin embargo dejó claro que van por uno de los principales bastiones priistas, que es el Estado de México, donde nunca ha habido alternancia.
Morena se concentró en la capital mexiquense para enviar mensajes claros a la oposición: principalmente al PRI y al gobierno del Estado de México, a quienes ve como sus únicos rivales para el 2023.
Este domingo no solamente arrancaron los trabajos de organización de los procesos electorales para el siguiente año, sino también el camino por las gubernaturas mexiquense y la de Coahuila.