Asambleas morenistas

El proceso interno de Morena exhibió los viejos vicios de los partidos políticos y las prácticas que ninguna fuerza ha podido erradicar, pero que ya no se habían observado porque en los últimos años nadie se había atrevido a colocar urnas en plazas públicas.

Para Morena, lo ocurrido este fin de semana en sus asambleas distritales debe encender distintos focos rojos, pues hay personajes que apostaron a vicios como el acarreo, la compra de votos, la inducción del voto, presiones por parte de los ayuntamientos, quema de boletas en un distrito, entre otras. Todas deberían sancionarse para enviar un mensaje de cero impunidad. 

Los distintos grupos morenistas buscaron fortalecer su presencia en los consejos y congresos estatal y nacional, rumbo a la elección de la dirigencia mexiquense, y del Comité nacional, aunque algunos actores políticos sufrieron derrotas. 

Uno de los que más se empoderaron fue el del senador Higinio Martínez, aunque no le alcanzará para ser el coordinador de los comités de defensa y futuro candidato morenista.

De la mano del texcocano lograron espacios varias y varios alcaldes, diputadas y diputados como los de Ecatepec: Azucena Cisneros, Faustino de la Cruz y Daniel Sibaja; así como su gente cercana en Texcoco: la alcaldesa Sandra Falcón, el diputado local Nazario Gutiérrez  y la diputada federal Karla Almazán, al igual que la delegada Martha Guerrero.

Del grupo de “Los Puros” quedó su líder Daniel Serrano en Cuautitlán Izcalli, pero también sumaron varias y varios consejeros más.

Cercana a Horacio Duarte está la alcaldesa de Valle de Bravo, Michelle Núñez, quien también será consejera y congresista.

En Toluca los ex panistas Gerardo Pliego y Óscar González garantizaron espacios, así como la diputada Mónica Álvarez Nemer, Patricia Durán en Naucalpan, los ediles Mariela Gutiérrez en Tecámac y Armando Navarrete en Nicolás Romero.

Quienes sufrieron derrotas fueron el alcalde de Nezahualcóyotl Adolfo Cerqueda, quien no pudo ser congresista en el distrito 31. Los diputados locales Max Correa y Mario Ariel Juárez tampoco lograron ser electos.

El alcalde de Ecatepec Fernando Vilchis también tendrá congresistas afines, entre ellos, su esposa Esmeralda Vallejo.

Después de lo ocurrido este fin de semana en las asambleas distritales morenistas, ese partido tendrá que trabajar duro por la unidad de su militancia, pues si van divididos a la elección del 2023 podrían escribir su derrota anticipada.

Los grupos, que están prohibidos en ese partido, pero existen, podrían dividir a Morena.

Delfina Gómez

La aspirante a la candidatura a la gubernatura de Morena en la entidad que menos ruido ha hecho es la actual secretaria de Educación federal, Delfina Gómez Álvarez, quien en los próximos días será declarada triunfadora de la segunda encuesta y coordinadora de los comités de defensa de la Cuarta Transformación del Estado de México.

Sin necesidad de aparecer en espectaculares, ni en portadas de revistas, sin mítines, sin dar entrevistas a los medios, ni hacerse promoción en sus redes, como sí han hecho la mayoría de las y los actores de los distintos partidos, prácticamente tiene asegurada la candidatura morenista para el siguiente año.

Gómez Álvarez ha mantenido un perfil discreto, ajena a confrontaciones, pero poco a poco las cosas han quedado claras para las y los morenistas: como se preveía desde el inicio, será ella la próxima coordinadora, posterior abanderada, y muy seguramente, la rival a vencer en 2023.

La alianza opositora

Por ahora no se ve la posibilidad de que se concrete una alianza opositora entre PRI, PAN y PRD, de hecho cada partido está caminando por separado; y mientras en el tricolor es evidente que las finalistas son: la secretaria de Desarrollo Social Alejandra del Moral y la diputada federal Ana Lilia Herrera, en el PAN el único aspirante a la candidatura es el legislador local Enrique Vargas del Villar.

En el PRD el diputado local Omar Ortega también aparece ya en espectaculares por si no hay coalición opositora y el alcalde de Villa de Allende, Arturo Piña está por iniciar giras. Cada uno juega sus cartas.

No se ve cómo el PRI podría ceder la candidatura, mientras el PAN considera que tiene al candidato con mayores posibilidades de triunfo, y el PRD aspira a garantizar un gobierno de coalición, pero en materia legislativa no hay ningún avance.

Los tres saben que si van por separado el más beneficiado será el partido Morena, el cual desde ahora encabeza las preferencias, y pese a sufrir derrotas dolorosas el año pasado, se mantiene como la primera fuerza en el Estado de México.

Se requerirá mucha madurez, diálogo y disposición a ceder para concretar la antes impensable alianza entre partidos que alguna vez fueron como el agua y el aceite y hoy nuevamente podrían ser aliados.