El pleno del Congreso del Estado de México aprobó reformas al Código Penal y al Código Civil del Estado de México para retirar la patria potestad de manera automática a los padres que cometan un feminicidio, a fin de poner a salvo a los hijos e hijas de las víctimas de ese delito y evitarles un largo proceso judicial, en el cual sólo aumenta la zozobra e incertidumbre.
A partir de cinco iniciativas de ley que presentaron las diputadas Anais Miriam Burgos Hernández, de Morena; Paola Jiménez Hernández y María Isabel Sánchez Holguín, del PRI y las bancadas del PRD y PVEM lograron construir un dictamen que pone en el centro el interés superior del menor y de las adolescencias.
Una de las autoras, María Isabel Sánchez Holguín, precisó que con las reformas se protege su integridad y se procura su estabilidad emocional y psíquica, sobre todo tomando en cuenta que los padres, es decir la pareja de la víctima, es responsable del asesinato por razones de género, en un 80 por ciento de los casos.
¿Cómo queda la ley?
En el Código Penal se señala una penalidad de 40 a 70 años de prisión o prisión vitalicia y de 700 a 5 mil días de multa, cuando el delito se cometa frente a las hijas o hijos de la víctima directa.
Aunado a ello “el sujeto activo perderá todos los derechos con relación a la víctima, incluidos los de carácter sucesorio, así como los inherentes a la patria potestad, tutela o curatela, guarda y custodia sobre las y los hijos”.
También se suspende provisionalmente el régimen de convivencia con los descendientes o ascendientes de la víctima, en los casos en los que las hijas e hijos menores de edad sean testigos presenciales del hecho, lo cual es refrendado con los ajustes al Código Civil de la entidad.
¿Por qué era necesario?
La diputada Isabel Sánchez consideró que las hijas e hijos de mujeres asesinadas por razones de género presentan una condición de vulnerabilidad desde la comisión del delito, el cual les genera un impacto irreversible en sus vidas, su desarrollo y su integridad.
Esto orilló a pensar en la necesidad de garantizar el acceso a la justicia, a la reparación integral del daño y a las garantías de no repetición, previendo situaciones de riesgo como puede ser la permanencia y convivencia con la persona agresora o el núcleo familiar de la misma, aun cuando éste tenga la patria potestad, tutela o guarda y custodia.
La custodia para la familia de la madre
Actualmente el Código Civil dispone que ante un delito grave se perderá la patria potestad, pero era necesario expresar claramente la suspensión de la patria potestad, tutela, guarda y custodia, a fin de que una vez sentenciado pierda ese derecho de manera definitiva.
“Es un tema en el cual coincidimos todas las bancadas. Lo primero es el interés superior de las infancias, lograr la no re victimización y la posibilidad de que al tener un tutor o tutora provisional no se encuentren en el vacío, mientras se define vía judicial. Hasta ahorita tenía que hacerse un juicio para tener la guardia custodia, pero con esto de manera automática y rápido la familia de la madre será quien tenga la tutoría, guarda y custodia”.
El decreto entrará en vigor cuando se publique en la Gaceta de Gobierno y con ello se resolverá el tema del tiempo que tardaba el juicio, la incertidumbre y no re victimización por la cual pasaban muchas familias.
“Del total de feminicidios, en 80 por de los casos el feminicida es el padre, la pareja. Estábamos dejando de lado a muchas infancias y adolescencias que pasaban por una situación terrible y dolorosa, donde no sólo pierden a la mamá, sino que también a su padre porque queda detenido y en muchos casos presenciaron los hechos. No se quedan a la deriva ni en el vacío. De manera automática la patria potestad pasará a la familia de la madre y cuando no sea posible el Estado deberá responder”.
Edomex, primero con esta ley
El Estado de México es la primera entidad en la cual se estará aplicando esta reforma. Esto, luego de que, en la comisión de víctimas se dieron cuenta que era una situación sumamente dolorosa, tardada, de mucho estrés, incertidumbre y angustia, porque en algunos casos la familia paterna no los dejaba ni siquiera saludar a sus tíos y abuela materna por los problemas que se generaban.
La violencia feminicida termina en promedio con la vida de 11 mujeres al día en México.
La diputada del PRI advirtió que ésta es la expresión máxima del machismo y la misoginia y la responsabilidad del Congreso es seguir trabajando en una legislación que garantice a menores la restitución de sus derechos y darles a sus tutores certeza jurídica; además de seguir impulsando iniciativas para garantizar presupuestos, programas y políticas públicas que les den seguridad educativa, alimentaria y de desarrollo integral.
FOTOS: ESPECIALES Y ML
