COMISIONES LEGISLATIVAS

Prácticamente a un mes del inicio de funciones de la actual Legislatura mexiquense se aprobará la integración de las comisiones legislativas, cuya negociación tuvo paralizado al Congreso local por más de 20 días.

Para avanzar en el reparto de los espacios legislativos las y los diputados decidieron crear siete comisiones especiales. 

Esto incluye mantener la de amnistía y repartir otras seis a los distintos grupos  parlamentarios: Sistema Aeroportuario, Sistema Penitenciario,  Seguimiento a la Reforma Constitucional, Recuperación Económica, Primera Infancia y Seguimiento a la Agenda 2030.

Las comisiones son importantes porque en ellas se analizan y discuten las iniciativas de nuevas leyes, reformas, puntos de acuerdo, e incluso se desahogan comparecencias de servidores públicos. Algunas también analizan los presupuestos y las cuentas públicas.

En la Cámara de Diputados del Estado de México había 36 comisiones permanentes, una especial y cinco comités legislativos, pero ahora serán siete especiales, con lo cual, habrá mayores espacios para repartir.

En el Congreso Mexiquense se conformó un bloque opositor integrado por el PRI, PAN, PRD, PVEM y Movimiento Ciudadano que eligió algunas de las mejores posiciones, entre ellas: Gobernación y Puntos Constitucionales, la cual analiza casi todas las propuestas, y Vigilancia del Órgano Superior de Fiscalización (OSFEM), encargada de la revisión de las cuentas públicas y de solicitudes de auditorías.

Por absurdo que parezca, todo parece indicar que el tricolor tendrá a su cargo la comisión a la cual el Órgano Superior le entrega los informes del manejo de recursos del gobierno estatal, encabezado también por el PRI; algo que suena incongruente, pero que al parecer para la oposición en el Estado de México es normal.

¿Habrá conflicto de interés en ese espacio? ¿Se garantizará la imparcialidad de quienes encabecen la comisión? 

Al menos la primera propuesta de reparto dejaba fuera a Morena de la mesa directiva de esa comisión: a la primera minoría, que si bien ya no tiene mayoría aplastante, llegó respaldada con el mayor número de votos y encabeza la Junta de Coordinación Política.

Con el trato a la bancada morenista, es inevitable cuestionarse de qué sirvió tanta complacencia de esa fuerza con el gobernador Alfredo del Mazo y con el PRI en la anterior Legislatura.

Al final, ni siquiera pudieron concretar la reforma para garantizar que el gobernador acudiera a la Cámara de Diputados a rendir su informe anual. Extrañamente, integrantes de prácticamente todas las bancadas se ausentaron para que no hubiera quórum.

Quiénes al menos en el inicio de este periodo ordinario han tenido un trato especial, pese a tener solo dos integrantes en sus grupos son el PVEM y MC, pues encabezarán comisiones importantes: el primero mantendría Legislación y Administración Municipal, y el segundo tendría la de Derechos Humanos.

Los espacios parecen ser un premio por el apoyo al bloque opositor.

Habrá que ver qué tan eficientes resultan las comisiones especiales que se crearán, pues entre los últimos órganos que se integraron en la Cámara local como comisiones permanentes están la de Familia y la de Asuntos Internacionales, las cuales han pasado de noche: sin trabajo legislativo y como espacios que solo han servido para repartirlos entre las bancadas y para dar empleo a algunas personas.

GLOSA

Vendrá la glosa del cuarto informe del mandatario estatal, Alfredo del Mazo, un tema que ha quedado pendiente por la falta de acuerdos entre las bancadas por el tema de las comisiones legislativas; sin embargo el Congreso deberá llamar a comparecer a integrantes del gabinete estatal.

Surge la duda en torno a si los aliados del PRI, es decir, Acción Nacional y el sol azteca serán oposición en la glosa, o apoyo para las autoridades, en pago a la alianza con el tricolor, partido que a fin de cuentas, en la última elección aportó el mayor número de votos.

En el Estado de México hay muchos pendientes: promesas incumplidas, metas que no se han cumplido, falta de transparencia, de rendición de cuentas, fallas en la entrega de los programas sociales, altos índices delictivos, avenidas y vialidades estatales en pésimas condiciones, problemas de seguridad en zonas como el sur, entre otras.

Anteriormente los grupos parlamentarios del PAN y del PRD eran parte de la oposición más crítica, pero como aliados del PRI ya no parecen ser los mismos partidos. 

Está por verse si la oposición en la entidad es de papel, pero pareciera que las comparecencias que vienen podrían ser simples pasarelas de servidores públicos.