Las y los diputados locales coincidieron que la aprobación del Paquete Fiscal no es un “cheque en blanco” pues permanecerán alertas y vigilarán la correcta aplicación de los recursos, con honestidad, transparencia y eficiencia, para que los 410 mil millones de pesos presupuestados para el siguiente año sean suficientes para atender todas las necesidades de la entidad.
Al respecto, el diputado Anuar Azar Figueroa indicó que tienen identificados 3 rubros en los cuales han puesto su atención y seguirán de cerca para señalar faltas o aciertos: seguridad, salud y el mantenimiento a los caminos y avenidas del Estado de México.
“Nosotros estaremos expectantes, vigilantes de que cada peso de este Paquete Fiscal se aplique con transparencia, en estricto apego a lo que hoy estamos discutiendo, no será un cheque en blanco para la Secretaría de Finanzas”.
Por su parte, la emecista Ruth Salinas consideró que, si bien hubo un avance, todavía quedan huecos que no se atendieron en su totalidad, pues faltaron asignaciones para un sistema de cuidados, mejorar el transporte y bajar la tarifas, subsidiar las multas de verificación y fortalecer los órganos internos de control y las contralorías.
Su compañero de bancada, Martín Zepeda, advirtió que solicitarán de manera periódica la rendición de cuentas de cada ramo y la explicación de cómo se ejerce el recurso, para verificar que todo sea como se planeó y como requiere la entidad.
Del PRD, el coordinador Omar Ortega Álvarez, reconoció avances en salud, seguridad, educación y el tema hídrico, pero todavía muy por debajo de lo que necesita la entidad, por lo cual también estarán vigilantes de la actuación en estas áreas.
Del Grupo Parlamentario del PRI habló Eduardo Zarzosa, quien consideró que se lograron beneficios en favor de las y los mexiquenses; se construyó un paquete fiscal para atender las necesidades más sensibles de la población y destacó que se haya aceptado destinar más recursos para seguridad.
Morena y el PVEM indicaron que el presupuesto permitirá reducir desigualdades, pues se apuesta por la justicia social, la transparencia, la disciplina financiera y el gasto con sentido humano, como resultado de la apertura, el diálogo y la voluntad de todas y todos los actores, luego de semanas de análisis y diálogo, así como un esfuerzo por mantener finanzas públicas sanas, con criterios de disciplina, racionalidad y eficiencia que garantizan la estabilidad económica.
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